...a lo que hay

Supongo que uno siempre termina adaptándose a lo que hay. Eso es lo que me pasó a mi... por fortuna. No creo que hubiese resistido estar todo el tiempo extrañando algo que ya no tengo. Sinceramente habría sido muy idiota de mi parte.

Sé que debo retomar también muchas cosas: debo retomar mi pasión por la lectura, la escritura, y el interés por temas relevantes. Sólo que todo a su tiempo, intento ir de poco a poco.

Me he dado cuenta de que me he acostumbrado a vivir sola. Ya no extraño tanto a mi familia, hay veces que estoy semanas sin hablar con ellos, eso no quiere decir que no me importen, por supuesto que me importan y los adoro, pero ya no soy tan apegada a ellos como lo era antes, lo cual puede ser tanto bueno como malo...

En fin; ahora estoy viviendo en una casa de asistencia y sinceramente: no estoy a gusto. Si todo va bien, para el próximo semestre estaré en un departamento; ahora sí, completamente por mi cuenta. Me emociona la idea de vivir sola y hacerme cargo de mi misma. Aunque también me da miedo, pues me conozco y se que no soy muy responsable que digamos. En fin...

((La imagen es del 'Parque Fundidora' en Monterrey))