Yo no soy una cabrona. No puedo serlo, y creo que nunca lo seré.
Hablo de cabrona, en el sentido de "bitch", en el sentido de "los hombres que aman a las cabronas" (ja).
Yo creo que los hombres son unos cabrones.
Pero igual hay muchos que no lo son.
Los hombres sólo son cabrones cuando no quieren a una vieja.. y viceversa, las mujeres sólo son cabronas cuando un tipo les vale madres.
Pero después de todo, es sólo mi opinión. Yo no podría ser ni un poquitito cabrona (como por ejemplo: no llamarlo, tenerlo esperando por mí, darle a entender que no me importa demasiado, ser una perra con él) con alguien a quien yo quiera. Puedo serlo con alguien que sinceramente, no me gusta tanto, pero eso no tiene mérito alguno. Admiro profundamente a las mujeres perras. Snif.
Cuando un hombre se enamora de verdad, ahí anda detrás como perrito faldero. Ash los odio. Y los odio porque generalmente cuando un hombre anda como perrito faldero, a las mujeres nos caga (al menos a la mayoría, según mis sondeos de opinión), nos fastidia su vocación de servicio, su mansedumbre y ahí vamos como borregas pendejitas detrás de un tipo al que le valemos popó y nos trae como "lazo de cochino" (amo esa expresión), y luego terminamos un sábado en la noche llorando y cortándonos las venas con galletitas de animalitos. Pero ¿quién nos manda? neta, ¿quién?
Teniendo todaaaaaaaaas las oportunidades del mundo, elegimos la peor. Todo por querer ser parte del cuento de hadas perfecto en donde tenemos que enfrentar viscisitudes para poder vivir happily ever after con nuestro príncipe azul. Puras pendejadas.
Pero los hombres no se salvan tampoco. Aman, adoran que les digamos que no. Pinche Arjona. Qué sabiduría de hombre, es EL filósofo de nuestra generación. (Después del niño predicador, claro está).
Re-fle-jo
Hace 5 años.